La historia de Enny Rodríguez

Gana el combate contra el cáncer

• 18 Julio 2017
• Enny Rodríguez

A la edad de 45 años, un viernes del mes de Enero, en una reunión con amigas comentamos si nos hacíamos la autoexploración de mama. Unas dijeron que si y otras que no. Esa misma noche decidí hacérmela y al hacerlo sentí, en la parte superior de mi seno, entre la clavícula y mi seno derecho, una bolita y pensé en seguida: Ah qué bueno! No está en el seno , no debe de ser Cáncer. Sin embargo al tener la duda el lunes siguiente fui al ginecólogo quien al checarme me dijo que no creía que fuese nada malo sin embargo me mandó a hacer una mamografía y un ultrasonido, lo cual hice inmediatamente y el radiólogo me dijo que habría que hacer otros estudios porque estaba sospechoso. Hablaron el ginecólogo y el radiólogo entre ello y decidieron operarme y hacerme en ese momento la biopsia, la cual salió positiva y desde ese momento empieza a cambiar mi vida y la de toda mi familia y amigos.

En esa época se hablaba muy poco sobre el cáncer y las personas que lo padecen o padecieron no lo comentan con nadie. Mi pensamiento en automático fue que me iba a morir, cáncer era igual a muerte, por lo que me invadió la tristeza y mis pensamientos fueron más allá en el tiempo, ¿qué sería de mi marido? ¿y de mis hijos que aún eran estudiantes?,¿ No estaría en la boda de ellos?¿ No conocería ni disfrutaría a mis nietos?

Hable con el oncólogo y le dije que estaba muy triste porque lo que sabía sobre el cáncer era que te daban quimios, se te caía el pelo, te sentías muy mal, vomitabas mucho y te morías. A lo que el me contestó que ciertamente por las quimios se te cae le pelo, pero no te tienes que sentir tan mal ni vomitar y sobretodo no te TIENES que morir.

Entonces tomé la decisión de luchar, de enfrentar todo lo que fuera necesario para salir adelante y ganar el combate contra el cáncer. Acepté el tratamiento correspondiente al cáncer que tenía:

8 quimios y 25 radiaciones, caída del pelo y sentirme débil, sin fuerzas, pero con el apoyo de Dios, de la familia y amigos, pude ir saliendo adelante.

En todo este proceso me di cuenta de la importancia de la alimentación, seguir los consejos de expertos de sobre lo que uno debe o no debe comer para sentirse bien y mejorar los glóbulos rojos, lo cual me ayudó mucho a que mis quimios me las pusieran en los tiempos programados. Además esta manera de alimentarme me ayudó a no sentirme tan mal durante este proceso.

En el tiempo en el que estaba terminando mis radiaciones, me habló la presidenta del grupo "Yucatán, ex alumnas Teresianas, A.C." para invitarme a formar parte de un proyecto en el que se pretendía dar ayuda psicológica, moral y económica a pacientes con cáncer. Me uní a este proyecto que tuvo por nombre “Nuevos horizontes” y en diciembre de 1996 se constituye con el nuevo nombre de “Asociación de mujeres Yucatecas contra el cáncer A.C.”(AMYCC).

A través de mi servicio en esta Asociación es que devuelvo a la vida algo de lo mucho que he recibido de ella con la ayuda de Dios. El trabajar para que mujeres no pasen estos momentos tan difíciles me hacen sentir que vale la pena todo esfuerzo.

Años atrás, el estar pendiente de mi chequeo de mama e ir a mis visitas ginecológicas me han permitido estar con bien el día de hoy.

Agradezco a Dios y a todas las personas que estuvieron acompañándome y apoyándome en un momento difícil como es el estar diagnosticada con cáncer .